
¡Crisis en la formación médica! Un tutor para 20 estudiantes en hospitales paraguayos
2025-03-13
Autor: Santiago
El alarmante aumento de las facultades de medicina en Paraguay ha llevado a una crisis en la calidad de la formación médica. Actualmente, hay un solo tutor clínico asignado por cada 20 estudiantes en las prácticas médicas, según un informe de la Comisión Ad Hoc que estudia la situación de las carreras de Medicina en el país.
Con un total de 43 facultades de medicina aprobadas por el Consejo Nacional de Educación Superior (Cones), 30 de ellas se encuentran concentradas en tres regiones: Alto Paraná, Amambay y Asunción/Central. Este fenómeno ha permitido que se formen anualmente alrededor de 43.000 estudiantes, pero el número de alumnos en el ciclo clínico (del cuarto al sexto año) es alarmante; para 2024, se estima que hay 10.824 estudiantes, de los cuales un asombroso 75% son de nacionalidad brasileña.
La Comisión señala que el crecimiento de las facultades no ha estado acompañado de un sistema de información robusto, lo que limita la gestión efectiva de los campos de práctica. La calidad de estos espacios está siendo comprometida, ya que muchos se encuentran sobrecargados y no están distribuidos adecuadamente, considerando la geografía ni las necesidades de salud de la población.
Por ejemplo, el Hospital Regional de Ciudad del Este, que cuenta con 180 camas y 38 consultorios, se enfrenta a un desafío crítico al recibir a estudiantes de cinco Instituciones de Educación Superior (IES), que reportan un total de 528 estudiantes. Esta cifra supera con creces la capacidad operativa recomendada del hospital.
Otro problema es la ausencia de criterios claros para la habilitación y control de estos espacios. Esto pone en riesgo tanto la formación de los futuros médicos como la seguridad de los pacientes. Los estudiantes a menudo se limitan a observar procedimientos sin tener la oportunidad de practicar de manera supervisada, con una relación estudiante-paciente que en algunos casos llega a ser de hasta seis estudiantes por paciente, cuando la norma internacional recomienda un máximo de dos.
La sobrecarga de estudiantes también afecta a los profesionales de la salud encargados de la supervisión, quienes deben atienden a sus pacientes mientras intentan educar a los alumnos, sin recibir incentivos ni tener un marco formal que regule su función docente. Idealmente, debería haber un máximo de 10 estudiantes por tutor, pero en la realidad esta proporción se ve gravemente superada.
Ante esta crisis, el Cones ha decidido formar un equipo técnico que examinará los resultados y evaluará la viabilidad de las recomendaciones para mejorar la situación. Sin duda, el futuro de la salud en Paraguay depende de la calidad de la formación médica, y la situación actual es una llamada urgente para la acción.