
Cathy Barriga enfrenta un cumpleaños desolador: tras las rejas y sin un futuro claro
2025-04-08
Autor: Benjamín
Este año, Cathy Barriga, la exalcaldesa de Maipú, celebra su 52 cumpleaños en condiciones muy diferentes a las del año anterior. En 2024, festejó su cumpleaños número 51 en la comodidad de su hogar, bajo arresto domiciliario y rodeada de sus seres queridos, quienes le ofrecieron regalos y una gran torta. Sin embargo, la situación ha tomado un giro drástico.
A pocas horas de su cumpleaños en 2025, Cathy se encuentra nuevamente en la cárcel de San Miguel, donde se suponía debía estar disfrutando uno de los días más felices de su vida. En febrero de este año, la justicia revocó su arresto domiciliario, lo que la llevó a un reingreso inmediato al penal, dejando en el aire sus esperanzas de recuperar la libertad.
Desde su detención, su equipo legal ha estado luchando arduamente para que se reevalúen las medidas cautelares aplicadas en su contra. Aseguran que Cathy no representa un peligro para la sociedad y que no tiene intenciones de evadirse, solicitando su regreso a casa con sus hijos. Sin embargo, un reciente revés judicial ocurrió cuando la justicia negó la revisión de estas medidas el 2 de abril, en una audiencia a puerta cerrada.
Constanza Encina, de la Fiscalía Regional Metropolitana Oriente, enfatizó que “no se presentaron nuevos antecedentes que justificaran una nueva cautela”. Esto dejó a sus abogados, quienes consideran la decisión como “bastante peculiar”, en la posición de apelar con la esperanza de revertir la decisión judicial.
La situación emocional de Cathy Barriga no es la mejor en estos momentos. Su suegro, Joaquín Lavín, ha señalado que el ambiente en la cárcel de San Miguel es complicado, con reportes sobre condiciones insalubres que incluyen infestaciones de chinches. "A medida que pasa más tiempo en prisión, su ánimo ha ido decayendo", comentó Lavín, lo que añade una capa más de dolor a un cumpleaños que debería ser motivo de celebración.
Mientras tanto, Barriga sigue luchando por su libertad y por recuperar su vida familiar, en medio de un proceso judicial que ha durado tres años, de los cuales ha estado formalizada durante un año y medio. La incertidumbre continúa acechando su futuro, y este cumpleaños se convierte en un recordatorio de la lucha que enfrenta tanto dentro como fuera de los muros de la prisión.