Después de las fiestas de fin de año, los colombianos se preparan para enfrentar uno de los meses más difíciles: enero. Conocido como ‘el guayabo de enero’, este mes trae consigo no solo resacas de las celebraciones, sino también una carga económica que se vuelve cada vez más pesada.

A partir de enero, se observa un aumento en los precios de varios productos y servicios esenciales. Sin embargo, uno de los incrementos más alarmantes es el de las tarifas de los planes de medicina prepagada, seguros de salud y planes complementarios, que han dejado a muchos colombianos preocupados.

Este sector ha crecido exponencialmente en la última década, pasando de menos de un millón a cerca de 4 millones de afiliados, un fenómeno acelerado por la pandemia y la incertidumbre debido a una posible reforma del sistema de salud anunciado por el Gobierno. A solo pocos días de iniciar 2025, las redes sociales estallan con quejas de usuarios que afirman haber visto aumentos en sus tarifas que superan el 5.20% de la inflación de 2024 y un impactante 9.53% en relación al aumento del salario mínimo.

El reconocido actor colombiano Ernesto Benjumea no dudó en alzar la voz en su cuenta de X: “¿Alguien vigila y controla las empresas de medicina prepagada? ¿Pueden incrementar lo que se les antoje y nadie los vigila?”. Su queja resuena con la experiencia de Luisa Hernández, quien compartió que la tarifa de su medicina prepagada subió de 714,000 a 826,000 pesos, lo que representa un incremento del 15%.

La situación es aún más delicada en el caso de su padre, un cliente nonagenario de AXA Colpatria desde 1989, quien vio un aumento del 50% en su póliza en apenas dos años. La frustración de Hernández es evidente, al señalar que no hay alternativas viables para cambiar de proveedor, dado el estado de salud de su padre.

Según las estadísticas del Dane, los gastos en salud aumentaron un 5.54% el año pasado, pero al analizar los datos más de cerca, se descubre que los seguros de accidentes y la medicina prepagada tuvieron un aumento sobresaliente del 14.03%. Este ajuste no solo impacta las tarifas de salud, sino que también se refleja en otras áreas, como la pequeña cirugía y la odontología.

Este problema no solo afecta a un ingreso familiar; es un tema que toca la vida de millones de colombianos que dependen de estos servicios para su bienestar diario. La pregunta que queda en el aire es: ¿qué medidas tomará el Gobierno para regular y controlar estos aumentos excesivos en la medicina prepagada? Es crucial que los ciudadanos estén alerta y exijan respuestas.