El Consejo de Médicos de la Provincia de Córdoba (CMPC) ha emitido un alarmante comunicado, revelando graves irregularidades en la contratación de personal médico en aproximadamente 30 clínicas, centros de salud, dispensarios y servicios de emergencia. La Asociación de Médicos de Guardia ha denunciado que se estarían empleando a individuos no autorizados para realizar funciones médicas en la región.

Según informaron a La Nueva Mañana, la situación es particularmente crítica en las zonas rurales de la provincia. El CMPC detalla que hay médicos extranjeros sin matrícula habilitante, estudiantes en Práctica Final Obligatoria (PFO) y paramédicos llevando a cabo actividades que van más allá de sus competencias.

"Exhortamos a las instituciones de salud a regularizar esta situación de inmediato, exigiendo la matrícula de todos los profesionales que brindan atención médica en sus centros. Es inaceptable que se deleguen funciones de atención a personas no matriculadas o estudiantes que aún están en formación", recalcaron desde el Consejo.

Además, advirtieron que no solo quienes ejercen de forma irregular se encuentran en problemas legales, sino también quienes los contratan conscientemente. Esto plantea un riesgo inminente para la salud de la población, un aspecto que enfatizó Carlos Mulqui, de la Asociación de Médicos de Guardia, quien alertó sobre el grave peligro que enfrenta la comunidad por estas prácticas.

No es la primera vez que se divulgan situaciones de este tipo en la provincia, donde cada vez más personas están preocupadas por la falta de supervisión y regulación en el sector salud. En ese sentido, se agregan llamados a la acción para que el gobierno provincial implemente medidas más estrictas para asegurar la calidad y legalidad del personal médico en la región.

Esta situación se enmarca dentro de un contexto mayor de crisis en el sistema de salud argentino, donde la falta de recursos y la precarización laboral han desatado una creciente preocupación entre la población. La urgencia de una regulatoria más firme se vuelve cada vez más evidente ante un escenario donde la salud de cientos de pacientes está en juego.