El expresidente estadounidense Jimmy Carter, quien falleció a los 100 años el 29 de diciembre, será honrado con un funeral de Estado el 9 de enero en Washington, D.C., un evento que promete ser monumental y lleno de tributos en su memoria.

Los homenajes a Carter comenzarán el 4 de enero en su querido estado natal de Georgia, donde se realizarán diversas ceremonias que reflejan su vida y legado. Desde su hogar en Plains hasta el Capitolio, los ciudadanos tendrán la oportunidad de rendir homenaje a este gran líder y humanitario, conocido por su trabajo en derechos humanos y su incansable dedicación a la paz mundial.

Comenzando su último viaje, los restos de Carter serán custodiados por el Servicio Secreto desde el Phoebe Sumter Medical Center en Americus, Georgia, hacia la granja donde creció. Este primer homenaje será un momento emotivo para los habitantes de Plains y de todas partes del país.

El recorrido por carretera incluirá paradas significativas, como en el Capitolio de Georgia y el Centro Carter, donde se llevará a cabo un servicio especial y se instalará una capilla ardiente en su honor. Allí, los visitantes tendrán la oportunidad de presentar sus respetos durante más de 60 horas, hasta la mañana del 7 de enero.

Una vez en Washington, D.C., se realizará una solemne procesión en carruaje hasta el Capitolio, donde su fúnebre reposará en la Rotonda, un lugar histórico que ha albergado a muchos grandes líderes de la nación.

La capilla ardiente en el Capitolio permanecerá abierta desde la noche del 7 hasta la mañana del 9, cuando los honores culminen durante el funeral de Estado en la Catedral Nacional de Washington. En este evento, se espera que el presidente Joe Biden pronuncie un emotivo panegírico, resaltando no solo la vida política de Carter, sino su impacto como filántropo y defensor de la justicia social.

Biden también ha declarado el 9 de enero como un día nacional de luto y ha ordenado el cierre del Gobierno federal, así como el cierre de la Bolsa de Nueva York, en señal de respeto y condolencia.

Tras el funeral en la capital, el cuerpo de Carter será trasladado nuevamente a Georgia, donde se llevará a cabo un servicio privado en la Iglesia Bautista Maranatha, y posteriormente se llevará a cabo su entierro en la residencia familiar. Este será un momento de despedida para una figura que dejó una huella indeleble en la historia de Estados Unidos y el mundo.