Se ha confirmado un increíble hallazgo en las profundidades del océano: los restos del USS Edsall, un buque de guerra estadounidense que fue hundido por fuerzas japonesas en el océano Índico durante la Segunda Guerra Mundial. El descubrimiento, realizado el pasado martes, fue llevado a cabo por la Marina de Australia, a 322 kilómetros al este de las Islas Navidad.

Este buque, que transportaba a 200 valientes soldados hacia el teatro de operaciones del Pacífico, se perdió en las aguas durante una feroz batalla. La embajadora de Estados Unidos en Australia, Caroline Kennedy, compartió detalles impactantes sobre el enfrentamiento. "El capitán Joshua Nix y su tripulación mostraron un valor extraordinario, esquivando más de 1,400 proyectiles de buques de guerra enemigos, hasta que fueron finalmente atacados por 26 bombarderos, sufriendo un golpe que resultó fatal", reveló Kennedy.

Este hallazgo no solo es un descubrimiento arqueológico, sino también un tributo a aquellos que hicieron el máximo sacrificio. La embajadora enfatizó la importancia de preservar este monumento para que las familias de los héroes que perdieron la vida en esta batalla puedan encontrar consuelo al saber que sus seres queridos descansan en paz.

El trágico hundimiento del USS Edsall tuvo lugar el 1 de marzo de 1942, en un momento crítico de la campaña estadounidense contra Japón, apenas tres meses después del infame ataque a Pearl Harbor que marcó la entrada formal de Estados Unidos en la guerra.

Hasta el día de hoy, no se conocen sobrevivientes de este ataque devastador. Sin embargo, en 1952, restos de cinco miembros de la tripulación fueron encontrados en una fosa común en Japón, en la zona de Kendari, lo que sugiere su trágico destino, ya que aparentemente fueron fusilados.

Las técnicas modernas de exploración submarina han permitido a los arqueólogos marinos realizar esta profunda investigación y se espera que en el futuro se realicen más hallazgos sobre la historia del USS Edsall y otros barcos que fueron parte de esta monumental guerra. La memoria de quienes lucharon y cayeron en el conflicto sigue viva, y cada descubrimiento contribuye a honrar su sacrificio y valentía.